El campeón de peso wélter de la UFC Jack Della Maddalena sufrió un rodillazo en la cabeza que le partió la nariz, deformándole el tabique desde entonces. Ocurriendo esto en su segunda pelea profesional en mayo de 2016.
El actual campeón de peso wélter de la UFC Jack Della Maddalena, ha tenido un ascenso meteórico en las MMA, acumulando un montón de victorias que finalmente lo llevaron a disputar el título de las 170lbs ante Belal Muhammad, a quien fue capaz de ganarle por decisión unánime, cortándole una racha de 11 victorias consecutivas, convirtiéndose él en el nuevo campeón de la división en la UFC.
Actualmente posee un récord de 18-2, y seguramente sorprenda a varios saber que está en una racha de 18 victorias consecutivas, dado que sus únicas 2 derrotas, vinieron en sus primeros 2 combates como profesionales, y fue durante este periodo cuando sufrió un golpe que le deformaría la nariz.
Jack Della Maddalena debutaría en las MMA cayendo derrotado por nocaut ante Aldin Bates en el primer asalto en marzo de 2016. Más allá de los golpes, no sufriría mayor daño. Pero en su segunda pelea sería cuando cambiaría todo, entrando al octágono nuevamente 2 meses después para enfrentar a su compatriota Darcy Vendy, cayendo derrotado por sumisión en el primer asalto, y sufriendo en esa pelea un rodillazo que en la nariz que lo deformaría para siempre.
En una entrevista con The MMA Hour, contó: "Tengo la nariz bastante mala. Ha sido destrozada. Creo que fue en mi segunda pelea de MMA. Recibí un rodillazo en la nrazi y desde ese día está en la dirección equivocada."
"Perdí mi primer pelea y luego fuí a otra y perdí 2 peleas. Mi coach no estaba en esa segunda pelea pero hablamos por teléfono. Ambos pensabamos que soy mejor peleador 0-2, así que hicimos la promesa de llegar a 10-2."
Della Maddalena cumpliría su promesa con creces, alcanzado un récord profesional de 18-2, no sólo llegando a la UFC, sino que también convirtiéndose en campeón de peso wélter en el camino.
Posteriormente en la entrevista, Jack explicaría que su nariz tiene arreglo, y que enventualmente puede volver a acomodarla en su lugar, pero que por el momento no le ve mucho sentido a hacerlo, debido a la naturaleza de su trabajo:
"La voy a terminar arreglando algún día. Pero pensé ¿cuál es el punto de ir arreglarla cuando mi trabajo consiste en recibir golpes en ella? Pero algún día la voy a arreglar. " Sentenció el australiano.